Escuela Dominical (Niños)

Es importante que los niños reciban enseñanza y cuidado espiritual que les ayude a crecer y madurar.

En Lucas 13:8 leemos de la buena tierra donde fue sembrada la semilla. Cuando llegó el tiempo de la cosecha, se vio que había producido mucho fruto. Los niños son como un campo de buena tierra. Ese campo está abierto para la siembra y hay muchos que quieren sembrar en el campo de la vida de ellos. El que siembra primero es el que tiene más posibilidades de cosechar. Si se le da tiempo a la Palabra de Dios para que eche raíces en nuestros niños, no habrá lugar para que en el campo de su vida crezcan otras cosas.